Con base en las puntuaciones de los cuestionarios, fueron identificados dos grupos: aquellas con bienestar sexual estable y superior y aquellas con bienestar sexual en declive. Las mujeres en el grupo de bienestar sexual en declive tuvieron niveles significativamente más altos de ansiedad y menor calidad de vida en todos los momentos. También padecían enfermedades crónicas con mayor frecuencia y eran menos felices en sus relaciones. No se encontraron diferencias en el método anticonceptivo cuando se clasificó como anticonceptivo hormonal versus no hormonal, o anticonceptivo reversible de acción prolongada versus de acción corta.
Por tanto, se pudo concluir que un menor nivel de ansiedad y una mayor calidad de vida se asocian con un bienestar sexual estable y mayor. El método anticonceptivo o el estado civil no se asociaron directamente con el bienestar sexual durante el seguimiento a largo plazo en mujeres en edad fértil.